Lo que esta cobrando cada vez más importancia es la decoración de las viviendas y las reformas del hogar. Aún más con la escasez de recursos humanos y materiales con cuáles nos podemos topar en los tiempos de la dura crisis económica que está atravesando el país. Teniendo en cuenta las necesidades y circunstancias de cada uno tenemos que encontrar el equilibrio perfecto entre las posibilidades y gustos de cada uno, lo que en principio puede resultar una tarea bastante complicada, pero no imposible. A la hora de escoger un estilo, nuestra propia “marca” de diseño lo primero que tenemos que tener en cuenta son nuestras posibilidades económicas, el nivel de presupuesto que nos podemos permitir.
Es el punto de partida de todas las planificaciones posteriores, al que tenemos que ajustar nuestras exigencias. Lo siguiente sería buscar ofertas. Lo que resulta bastante fácil cuando casi todos de los profesionales del sector sufren graves problemas de financiación. Esto nos abre la posibilidad casi indefinida de negociar el precio. Lo más importante es una vez fijado el proyecto pedir presupuestos en varios sitios. Lo que antes era perdida del tiempo ahora nos puede suponer un ahorro de por lo menos un treinta por ciento.
A la hora de calcular el presupuesto tenemos que buscar un equilibrio entre el coste y la calidad de los materiales. Siempre exigiendo una garantía de por lo menos de cinco años. Acudiendo a profesionales con cierto prestigio que no nos dejarán con la obra a medias y con un sinfín de anticipos pagados.
Las reformas DIY (hazlo tú mismo) están cada vez más de moda. ¿Por qué? Primero, porque te ahorras un dineral en mano de obra. Además, tener el control total sobre lo que haces y cómo lo haces no tiene precio. Por no hablar de la satisfacción de ver algo hecho por ti mismo, ¡eso no te lo quita nadie! También es una forma de ponerle tu toque personal a cada rincón de la casa. Y ojo, mientras reformamos, aprendemos un montón de cosas nuevas. Por todo eso, cada vez más gente se anima a darle caña a las reformas DIY.
Beneficios de las reformas DIY
- Ahorras dinero: nada de pagar a otros por algo que puedes hacer tú.
- Control total: tú decides los materiales, colores y acabados.
- Aprendes: cada proyecto es una oportunidad para mejorar tus habilidades.
- Satisfacción personal: ver el resultado final y saber que lo hiciste tú no tiene precio.
Cosas a tener en cuenta antes de empezar
Antes de lanzarte:
- Sé realista con lo que sabes hacer.
- Haz un presupuesto (materiales, herramientas, posibles imprevistos).
- Ten claro cuánto tiempo vas a necesitar.
- Piensa si va a afectar al valor de la casa.
- Y sobre todo, paciencia… las chapuzas salen caras.
Pintura
Cómo elegir los colores perfectos
El color lo cambia todo. Los tonos neutros (blancos, grises, beige) nunca fallan. Pero si quieres darle rollo a una habitación, atrévete con colores más vivos. Eso sí, piensa en el estilo de la casa y la luz natural que entra.
Preparar las paredes
Nada de pintar sobre desconchones o humedad. Lija, limpia y repara antes de empezar. Así te aseguras un resultado duradero y bonito.
Consejos para un acabado profesional
- Usa herramientas de calidad (brochas, rodillos).
- Da varias capas finas, no una gorda.
- Protege los bordes con cinta de carrocero.
- Y sobre todo, no tengas prisa.
Suelos
Tipos de suelos
- Madera: elegante y duradera, pero cara.
- Laminado: imita la madera y es más barato.
- Baldosas: resistentes, perfectas para cocina o baño.
- Vinilo: económico, fácil de limpiar y mil diseños.
Cómo instalar cada tipo
Cada suelo tiene su truco. Mide bien, prepara la base y sigue las instrucciones. Si no lo ves claro, mejor pedir ayuda.
Cómo cuidarlos
- Limpia a menudo.
- Usa productos adecuados.
- Protege las zonas de mucho uso con alfombras.
Cocina
Cambiar armarios y encimeras
Renovar muebles y encimeras puede darle un aire totalmente nuevo a tu cocina. Hay opciones para todos los bolsillos y estilos.
Cambiar los electrodomésticos
Unos electrodomésticos modernos ahorran energía y dan un toque actual. Busca modelos eficientes y con buen diseño.
Añadir un salpicadero
Protege las paredes y añade estilo. Los azulejos tipo metro nunca pasan de moda. Y si te atreves, prueba con vinilos adhesivos.
Baño
Renovar grifería y sanitarios
Cambia el grifo, el lavabo o el inodoro y parecerá otro baño. Pequeños cambios, gran resultado.
Poner ducha o bañera nueva
Si te atreves, cambiar la bañera o instalar una ducha puede transformar tu baño. Solo asegúrate de tener claro cómo hacerlo.
Crear un ambiente tipo spa
Velas, plantas, toallas suaves y buena iluminación. Y si puedes, una ducha con efecto lluvia. Relax asegurado.
Exterior
Hacer una terraza o patio
Perfecto para disfrutar del buen tiempo. Madera, piedra, hormigón… lo que encaje contigo.
Montar un jardín bonito
Flores, césped, alguna fuente… y listo para relajarte o presumir con las visitas.
Poner luces exteriores
Luces solares, guirnaldas, focos… Lo que prefieras para darle ambiente por la noche.
